EL MISTERIO DE CERRO CHAME

Cerro Chame 

Tal vez has escuchado de cerro chame o quizás no. Lo cierto es que este majestuoso cerro  domina la vista en el Distrito de Chame en la República de Panamá. Pero más que su belleza y hermosa vista en su cumbre, este coloso lleva un  secreto que de solo pensarlo pone a temblar a más de 4.

Hace unos años escale con unos amigos dicho lugar,  cuando de repente todos quedamos paralizados por un sonido inusual era un rugido de un felino que retumbaba por las montañas nos miramos y sorprendidos  y atemorizados; y justo cuando empezamos a pensar por donde escapar como un fantasma aparición un campesino trepado en un caballo, sin pensarlo le preguntamos si la cima estaba lejos y si el también había escuchado ese estruendoso rugido. Sonriendo exclamo  estás a media hora de la cima y si es un tigre pero descuiden está muy lejos para que lo topen.  Un poco calmados fuimos a la cima tomamos fotos y bajamos apresurados.

Unos años más tarde volví al lugar junto a mi pareja  un domingo dispuestos a subir la montaña cuando las huellas de unas pisadas de un mamífero me paralizaron por el diámetro.. Di media vuelta puesto que recordé aquel episodio de años atrás.

Fuimos a un restaurante y hablamos con los lugareños y les explique que había encontrado las huellas de un animal un Ocelote o Manigordo como se le dice en Panamá. Gran fue mi sorpresa cuando alrededor de 3 personas que sin conocerse me dijeron una historia que me dejo con la boca abierta.

Hace unos años una acaudalada mujer extranjera llamada por ellos mismo como la (Mona lisa), había comprado un número no determinado de hectáreas en las faldas del cerro, con una  idea un poco bíblica de traer parejas de animales de todas partes del globo para un mega zoológico en sus tierras. Tal vez no es mala la idea puesto que con millones dólares casi todo es posible, si no hubiera pasado un pequeño accidente el cual todos contaron con exactitud

. La dama acaudalada trajo una hembra y un macho de felinos al zoológico, pero en el preciso momento de bajar las jaulas  se desprendieron las cuerdas  cayendo y liberando a la pareja de nada menos que dos Tigres de Bengala en el Cerro Chame.

Vaya dos bengalas y yo con un cobarde machete pensé; y lo peor es que al tiempo no eran dos si no cuatro los felinos puesto que la tigresa había quedado preñada, lo que llevo a  atacar ya no venados y conejos si no novillas de 500 libras arrastrándolas a mas de 100 metros de su captura según los relatos de los lugareños. Dicen que se han organizado expediciones de caza o captura de los animales pero que ninguna da con el objetivo,  por lo tanto estos visitantes de el continente asiático están de visita permanente en suelo del istmo. Esto deja un mensaje a veces que el dinero puede crear más que soluciones y felicidad muchos problemas a propios y extraños en tu entorno. A sí que si un día se te ocurre subir el cerro trata de llevar algo más que un machete tal vez algo te este mirando a un costado tuyo mientras subas la montaña.